Diez consejos para empezar con lo que deseas:

1. Elije tu propósito y conviértelo en tu proyecto. Seguro que, si confeccionas una lista, te darás cuenta de que tienes muchas inquietudes. Pero no podemos cambiar o embarcarnos en todo a la vez. Olvida tu cerebro multitarea y no quieras modificar todo de golpe. Cuando consigas automatizar el primero, pasa al segundo.

Es preciso sacudir enérgicamente el bosque de las neuronas cerebrales adormecidas; es menester hacerlas vibrar con la emoción de lo nuevo e infundirles nobles y elevadas inquietudes.

Ramón y Cajal

2. Reflexiona sobre tu meta. Si contestas a las siguientes preguntas en relación a tu objetivo, tu compromiso con él aumentará: ¿qué quiero?, ¿por qué?, ¿para qué? y ¿con qué? El “con qué” hace referencia a tus fortalezas, valores y actitud para lograrlo. Cuando te enfrentas a algo nuevo, y dado que eso supone salir de la zona confortable, es recomendable tener la seguridad y la confianza de que estás preparado, que tienes capacidad y que vas a poder lograrlo. Aunque sea difícil.

3. Házle hueco. Sea lo que sea lo que deseas, aprender o iniciar, necesita tiempo. Si no te buscas un espacio en tu agenda y lo conviertes en rutina, lo normal es que termines postergando lo que ahora no forma parte de tu vida.

4. Resáltalo. Todo aquello que no forma parte de nuestro orden habitual es fácil olvidarlo. Si tienes una agenda, márcalo con fosforito. Si utilizas la alarma del móvil, ponlo una diaria con el nuevo objetivo. No abuses de tu memoria o del “debería acordarme”.

5. Rodeate de todo lo necesario, así no tendrás excusa para no empezar. Por ejemplo, si está a dieta, compra los alimentos del régimen; si empiezas a hacer deporte, busca la ropa que vas a ponerte, o si te inicias en la fotografía, prepara el material.

6. Empiece hoy. No hay ningún estudio con rigor científico en el que se relacione el lunes o el primero de enero exclusivamente con el comienzo de un nuevo hábito. El martes o el jueves son tan buenos días como cualquier otro. Retrasar todo para el lunes es otra manera de postergar y de dejar que la pereza venza a tu fuerza de voluntad. El mejor día para iniciar algo es hoy.

7. Emociónese. Las emociones avivan el recuerdo, te producen bienestar, y estar apasionado con lo que se hace fideliza el hábito. Busca cómo te sientes, lo que vas a conseguir, cómo mejorará tu vida personal o profesional. Disfruta y estate presente.

8. No escuches a la voz interna que te dice que estás cansado,que «qué sentido tiene» y «que la vida tiene cuatro días y son para disfrutarlos». Nuestro cerebro está muy entrenado para buscar excusas y seguir en la zona confortable. Esa voz interior es muy pesada y puede llegar a ser muy convincente.

9. Se disciplinado. Tómate en serio tu hábito. Tomarlo en serio no significa que te pongas serio, sino que seas una prioridad para ti, algo a lo que dedicarle su valioso tiempo. Y que ocupe un lugar especial en tu agenda.

10. Convierte tu nuevo hábito en tu filosofía de vida. Esto te dará otra dimensión y calma. No se trata de aprender algo ya, sino de que lo disfrutes y sepas que tienes toda la vida para practicarlo. Si, por ejemplo, has decidido empezar con la actividad física, no te sientas mal si un día falla. Tienes mañana, pasado y toda la vida para hacerlo. No se trata de llamar a la culpabilidad. Esa emoción no arregla nada. Solo hay que ser disciplinado y tener serenidad. Si de verdad es algo importante, mañana volverás a la carga. No es todo o nada. Se trata de incorporar algo bueno para cada uno y encajarlo en la vida para disfrutarlo, no para que sea un sufrimiento más en el caso de no poder cumplirlo un día.

 

ANNA PARINI

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